La Sociedad Boliviana de Cemento (Soboce) anunció una inversión superior a los 200 millones de dólares para los siguientes tres años.
Los recursos se destinarán a la construcción de una nueva planta en Santa Cruz y las ampliaciones de las demás plantas, informó el gerente nacional de Comercialización de la cementera, Marcos López.
"Los próximos tres años se estima invertir más de 200 millones de dólares. Principalmente será en ampliaciones”, afirmó.
La planta Yacuses de Santa Cruz actualmente está en etapa de verificación del suministro de gas; ya se cuenta con el terreno y se espera que en 2018 entre en operaciones. Su producción será de 860.000 toneladas al año
La oferta actual de Soboce es de 1,6 millones de bolsas al año.
También están previstas las ampliaciones de las plantas de Viacha, de Emisa en Oruro y de El Puente en Tarija.
Según López, en los últimos años la demanda del insumo subió en un 10%, impulsada, principalmente, por la inversión pública y privada y los créditos de vivienda con interés social.
Pese al incremento del 4,5% en el precio de la bolsa de cemento las ventas de Soboce no mermaron y mantienen una estabilidad. Hasta fin de año se prevé un crecimiento de 18% en ventas.
Incremento en los precios
Página Siete hizo una verificación del precio de la bolsa de cemento en diferentes ferreterías de la ciudad, donde constató que en algunos negocios está por encima de los 58 bolivianos.
López aclaró que la cementera no puede controlar ni regular el alza. Sin embargo, luego de una supervisión a ferreterías de las ciudades de La Paz y El Alto se confirmó que en los lugares alejados y en la zona Sur se comercializa hasta en 59 bolivianos, pero en la mayoría está a 58 bolivianos. Además en las seis agencias de Soboce en Viacha, El Alto y La Paz el precio final al consumidor es de 58 bolivianos, complementó el ejecutivo.
Para López la incidencia, por el incremento de la bolsa de cemento en un 4,5%, sólo tendrá un impacto de 0,37% en los costos de la construcción.
El presidente del Colegio de Arquitectos, Wállter Hoz de Vila, admitió que el nuevo precio influirá en las edificaciones, pero el efecto será "mínimo” por lo que no generará una alza en cadena de los demás materiales de construcción.
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